Habitualmente los entrevistadores (tanto el equipo de recursos humanos como los abogados) quieren saber a qué otros despachos han aplicado los candidatos, y en qué otros procesos están participando. Aunque como regla general nuestro consejo es ser lo más sincero posible durante las entrevistas, esta es una de las preguntas en las que puede ser recomendable no dar toda la información al entrevistador.
Los despachos hacen grandes esfuerzos por tratar de atraer a los mejores alumnos de las universidades, y conseguir que apliquen a sus programas de prácticas. Por ello, causarás mejor impresión si haces ver al entrevistador que has realizado una primera selección de los despachos que más te atraen, y esos son los despachos a los que has aplicado, que si confiesas que has aplicado a todos los programas de prácticas de los principales despachos. No hay nada de malo en hacer esto (de hecho es recomendable que apliques a todos los despachos que se ajusten a lo que buscas), pero quedarás mejor con el entrevistador si le haces ver que su despacho está entre tus preferencias.
Tampoco es recomendable que confieses al entrevistador haber aplicado a despachos que puedan considerarse de una categoría inferior o superior a aquel en el que te están entrevistando. Identifica los despachos a los que hayas aplicado que sean equivalentes en prestigio y condiciones de sus prácticas al que te va a entrevistar, y destaca esos despachos.
Idealmente, si estás participando en procesos de selección de otros despachos de prestigio de categoría semejante (esto es, si ya te han llamado para la primera entrevista), házselo saber al entrevistador. El hecho de que estés avanzando en otros procesos trasladará al entrevistador que tu perfil es apreciado por sus despachos equivalentes, mejorará tu probabilidad de avanzar en el proceso, y puede generar sensación de urgencia en el despacho, acelerando los trámites.